Si una puerta se cierra, la otra se abre

Hola hola melcochas, hoy están entrando en territorio desconocido con un cuento tenebroso, así que apaga las luces.
Estás en tu casa, saliendo de la ducha apurada porque tienes que ir a clases, giras la perilla de la puerta de tu cuarto y ¿Qué pasa? ¡Boom!  Esta cerrada (NOOO), dejando fuera de tu alcance toda tu ropa, junto con tus ganas de ver matemáticas el lunes a primera hora ¿Qué puedes hacer? (y no, quedarte viendo tele en toalla no es una opción)  Sal corriendo a abrir las puertas del closet de tu madre y busca las prendas que más se parezcan a ti o las prendas que agarró prestado sin permiso y nunca devolvió.

Esta es mi versión de esta historia de terror, basada en hechos reales. Los jeans de corte alto son mi adicción y estos los usaba mi mamá cuando tenía más o menos mi edad, me quedan un poquito grandes pero nada que un cinturón y doblar el ruedo no pueda arreglar. Lo combine con una franela sin mangas y con una especie de chaleco súper ligero, por último, hice trampa y me puse mis botines negros dándole un estilo hippie+ rocker al atuendo.

El mundo es muy grande como para que esta historia no le haya pasado a alguien y quiero saber si te pasó a ti. Es más, vamos a hacer de esto un reto *cara malvada* Los reto a salir de su zona de confort y entren en el closet de sus madres a crear atuendos. Challenge accepted? Si se atreven a superar esta historia de terror usa #RetoMelcocha para poder ver sus creaciones. 

1,2,3 GO! 

Les mando besos apurados melcochas.

Zapatos: Forever 21 / Solitario: Artesanales

Fotografía: Stefany Corrales